Sí, hemos quedado Campeones de Madrid en categoría infantil.
Y me emociono si hecho la vista atrás y recuerdo como empezaron estos niños que
poco a poco ascienden a jugadores de baloncesto. Ha sido, al menos para mí, y
espero que para todos ellos, un año inolvidable en cuanto a lo deportivo, y a
lo personal.
La temporada empezaba bien, todos eran compañeros e
individualmente lo hacían genial. Pero ya estamos en infantil, ya nos
enfrentamos a diferencias de altura, diferencias físicas y ser bueno botando no
valía. Comenzamos un plan para conseguir la máxima compenetración posible,
haciendo que la mayoría de jugadores pudieran aportar y que cada vez todos
adquirieran más y más responsabilidad y peso en el colectivo.
Y está claro que lo hemos conseguido. Hemos pasado de un
equipo con chicos buenos a un EQUIPO CAMPEÓN. El mérito es de todos y cada uno
de los jugadores que hacían lo que se les decía, y además lo hacían bien. Que
mejoraban en cada entrenamiento y lo demostraban en cada partido. Ha sido una
temporada perfecta, con partidos muy bonitos y sin rivales pequeños. Siempre
mostrando respeto por el oponente y jugando nuestro mejor baloncesto. Estos
chicos se lo han ganado a pulso, y estaremos de acuerdo en que, tratándose de
baloncesto nadie deja nada colgando, todos van a muerte.
Nuestro trabajo, dedicación, intensidad y pasión por lo que
hacemos cuando lo hacemos, crea en cada uno el sabor de boca que realmente
hemos perseguido desde el día 1. Para todos y por todos los jugadores de este
equipo, ha sido un honor poder entrenar a estos “pequeños hombres”.
A mis jugadores infantiles 2014/2015: Don Álvaro Bernáez,
Don Pablo Rodríguez, Don Alonso Roldán, Don Fernando Urea, Don Álvaro Campos,
Don Diego Corral, Don Daniel Pató, Don Enrique Pedrero, Don Ángel Torres, Don
Manuel Sanz y Don Rodrigo Recio.
“Muchas gracias por la oportunidad de entrenaros. Muchas
gracias por todo lo que he aprendido de ustedes, y gracias por dejaros guiar
por el buen camino. No lo habríamos conseguido si TODOS no hubieran tenido esas
ganas y afición por la que regimos nuestro trabajo. Defensa, defensa y defensa.
No dejen el baloncesto NUNCA. Si trabajan, disfrutan y compiten, llegarán
lejos.
Un verdadero honor y privilegio haberles tenido bajo mi
cargo, no les olvidaré. Pero no se preocupen, tendrán noticias mías…”
Por último agradecer al cuerpo técnico, entrenadores,
colegio y especialmente a mi querido entrenador y mentor Fernando Gómez por su
incuestionable ayuda y sacrificio, y la oportunidad de haber labrado esta
temporada de cinco estrellas.
¡De nuevo gracias y hasta siempre!
PD:
“En California tenemos un dicho… ¡1 – 2 – 3 MATER!”
Carlos Santigosa
Entrenador Infantil Masculino de Baloncesto
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